La ministra de la Corte de Apelaciones de Santiago, Dobra Lusic, realizó una extraña defensa a su cuestionada gestión como magistrada y culpó a los medios de comunicación de “ensañamiento” y “virulencia despiadada”, abogando a su vez por una regulación a la prensa.

Así lo hizo ver durante su comparecencia ante la Comisión de Constitución, Legislación y Justicia del Senado en su camino a buscar suceder al jubilado ministro Miltón Juica y llegar a la Corte Suprema.

“Creo que hay que regular la prensa, los medios de prensa. No puede ser que cuando una persona llega a un momento tan trascendente, importante de su vida, que es la culminación, sea objeto de gestiones de esta clase, con un ensañamiento, con una virulencia despiadada, es no puede ser. ¿Si yo no fuera mujer habría sido igual? Yo pienso que no”, expuso la jueza.

Su nominación parecía tema resuelto para ser ratificada en la Cámara Alta, pero los antecedentes difundidos por los medios de comunicación en las últimas semanas llevaron a poner dudas al respecto. Es así como se ha cuestionado su votación en una causa contra el BancoEstado a pesar de estar inhabilitada para hacerlo por la propia Suprema.

Además, se suma también la investigación contra John Campos, quien es cercano a Lusic, por su nominación como suplente en la Quinta Notaría de San Miguel a pesar de contar con antecedentes penales.

En la instancia legislativa, la ministra también tuvo que responder a la querella conocida hace algunos días de la médico cubana Taimi Silva y su madre Reina Caballero, por falsificación de instrumento público y estafa en la venta de nueve propiedades de su hermano Dinko Lusic a ella y a otra hermana, Yelica Lusic, cuya transacción ocurrió hace unos 5 años, propiedades que estaban a nombre de las querellantes que le cedieron un poder a su hermano.

Ante esta consulta, la ministra dijo que «es un asunto familiar. Pero saben, esta señora es una médico, mi hermano se enamoró de ella en Cuba, la sacó en balsa, la trajo a Chile, se casó con ella, trajo a su mamá, trajo a su papá, trajo a su cuñada y trajo al marido de la cuñada, les construyó una casa, les dio casa y comida, y le pagó los cursos para que pudiera revalidar su título de médico. (Ella) convalidó el título y antes de los dos meses se fue de la casa y dejó a mi hermano solo, con todo un patrimonio comprometido, patrimonio en el que como familia habíamos intervenido todos«.

Respecto a su relación con el considerado “operador judicial” John Campos, luego de conocerse una grabación en la que aparece este personaje con la jueza Marcela Guerra, exasesora del senador Guido Girardi, en el marco de su anterior nominación para integrar el máximo tribunal del país, señaló que Campos le había ofrecido realizar gestiones para fortalecer su opción de integrar la Suprema, asegurando que nunca ofreció nada a cambio.

«Con ocasión de la primera quina el año pasado me ofreció su cooperación para hacer gestiones y obtener un éxito en mi posible nominación. Se lo agradecí al igual que a muchas otras personas, él no fue el único. Nunca ofrecí nada a cambio, nunca ofrecí nada a cambio, nunca entré en operaciones de red. Este audio es un delito, no puede una conversación privada, grabada sin la autorización de uno de los que interviene, difundida, servir para atacarme a mí«, precisó.