Hasta la Biblioteca de Santiago, llegó este domingo la Jefa de Estado, Michelle Bachelet, para conmemorar el Día Internacional del Libro y el Derecho de Autor.

La máxima autoridad visitó la Sala Infantil, donde compartió con niños de más de 5 años; la Guaguoteca, con menores de 0 a 4 años y sus padres; y la Sala +60, dedicada a las personas mayores, donde se realizaba un taller de lectura y memoria.

Tras este recorrido, la Presidenta Bachelet destacó que “lo que vemos en este recorrido es que la lectura no tiene edad, que no reconoce fronteras ni formatos, y que se expresa y se puede vivir de miles maneras posibles. Esa es en parte la gracia y la vocación profunda de las bibliotecas que hemos ido creando desde hace ya más de una década: espacios de alto estándar, lugares de encuentro y diálogo para la comunidad, donde la relación con el libro y la lectura se expresa en sus múltiples dimensiones, en toda su riqueza”.

Del mismo modo, afirmó que su Gobierno está empeñado en continuar implementando estos espacios en todo el territorio, como ha ocurrido con inauguración de la biblioteca de Ruca Raqui, junto al lago Budi, en Puerto Saavedra, y la futura apertura de la Biblioteca Regional de Coquimbo, junto a la antigua casa de Gabriela Mistral, en Las Compañías.

“Así vamos consolidando el encuentro con la creación literaria, estimulando el diálogo y el intercambio, y consagrando nuevos espacios para la deliciosa intimidad con la poesía, la novela gráfica, la historieta, la literatura infantil y juvenil, el ensayo”, dijo.

Entre las medidas desarrolladas por el Gobierno para impulsar este hábito, está la implementación del Plan Nacional de la Lectura y el Libro 2015-2020, anunciado el 23 de abril de 2015. En el marco de esta iniciativa, se celebrará el “Mes del Libro 2017”, relevando la figura de Violeta Parra en el año de su centenario, mediante la distribución de un Cancionero de la autora en todo el país; y se lanzará la campaña “Aquí se Lee”, que apunta a reconocer y visibilizar la lectura en sus diversas prácticas y experiencias, además de los espacios dispuestos para ella.

“Leemos siempre, en nuestras casas, en las salas de espera, en el transporte público, en nuestros momentos de ocio, en nuestros momentos de estudio. Y reconocer y fomentar esa diversidad es bueno, es sano y es productivo para hacer de Chile un más culto, más informado, más integrado y, sobre todo, más feliz”, agregó la Mandataria.