El Partido Por la Democracia (PPD) valoró la decisión adoptada por la Asociación Chilena de Municipales (AChM), en orden a convocar para los primeros días de diciembre a un plebiscito en 330 comunas del país para que la ciudadanía se pronuncie sobre la necesidad de contar o no con una Nueva Constitución.

En este sentido, el presidente de la Bancada Regionalista, Rodrigo González, celebró “la decisión y el coraje de la AChM, que invita al país a pronunciarse a través de una consulta ciudadana sobre una Nueva Constitución y sobre una agenda social amplia que responda a los intereses de toda la población en los aspectos más relevantes como pensiones, salud, salario mínimo, transporte, seguridad, medio ambiente, corrupción y abusos”.

“Es también un ejemplo para el Gobierno que debe escuchar la voz de los alcaldes y concejales de Chile que están cerca de la vida cotidiana y de las necesidades de la gente. Ellos han demostrado una especial sensibilidad para reconocer la gravedad y profundidad de las demandas y por tanto la necesidad de reformas profundas, que el Ejecutivo no ha sabido interpretar”, recalcó el parlamentario.

González añadió que esta decisión de los alcaldes y alcaldesas de Chile “constituye un hecho de la mayor relevancia, pues los municipios son el órgano del Estado que está más cerca de los ciudadanos, de sus carencias, de las enormes desigualdades y abusos que se han acumulado por años y desencadenaron el malestar y las protestas multitudinarias”.

“La invitación a participar en la consulta es un desafío para todos: en especial para el Parlamento, que con humildad y autocrítica por no haber alcanzado acuerdos institucionales, debe ponerse detrás de ella porque representa una forma institucional participativa, transversal, unitaria y pacífica de buscar caminos para abordar la crisis social y política del país”, dijo el diputado.

Finalmente, el representante de los parlamentarios regionalistas concluyó que esta convocatoria a plebiscitos comunales “abre una puerta de optimismo y esperanza que este conflicto nacional, que tiene el peligro de derivar en una confrontación de inesperados resultados, pueda conducirse por el camino democrático y de participación ciudadana indispensable para generar alivio y una respuesta acorde al gran movimiento ciudadano”.