Análisis: La desobediencia ciudadana a las normas en pandemia, un nuevo sistema educacional y la nueva escuela

Esta pandemia desnuda a Chile de pies a cabeza.

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Esta pandemia desnuda a Chile de pies a cabeza, que por lo demás, es lo que se comenzó a ver a partir del 18 O. Antes de la pandemia COVID 19, existieron hechos lamentables, qué por a, b, c no fueron analizado desde un perspectiva pedagógica, y  tienen que ver con la formación ciudadana y los valores éticos,  en un primer momento se les encarga a las instituciones formales de la educación chilena como son: Jardines, Escuelas, Liceos, Colegios, IPES y Universidades; y en una segunda instancia a los tribunales de la república para que el imperio de la ley se pronuncie e imponga en un estado civilizatorio.

No obstante, en este artículo nos referiremos a las primeras, a las instituciones educativas, encargadas no sólo de reproducir la cultura seleccionada a través del currículum, sino también de hacer perdurar, a través, del tiempo la identidad, valores y sentidos de nuestra sociedad, con la implementación y ejecución del currículum mediante los procesos de enseñanza aprendizaje en todos los niveles y modalidades.

¿Qué nos indicaban las acciones dolosas antes del 18 O?  Un culto psicótico  al individualismo, libertad y crecimiento individual en el ámbito económico y de derechos políticos (Influencia y poder), no importando como los ejerza, siempre y cuando logre su objetivo individual, ejemplos:   Colusión de pollos, colusión del papel confort, colusión de las farmacias, financiamiento de campañas políticas, PENTA (que término con clases de ética para Délano y Compañía, pese haber realizado esto por muchos años con premeditación,  alevosía y en tiempos de normalidad entre comillas). Dan cuenta de un déficit inmenso de formación ciudadana, bien común, honestidad, solidaridad, colaboración, empatía, participación, deberes y derechos en función de la valoración de la persona como parte de un grupo social y no sólo por el hecho de ser persona sola o aislada y sin vínculos, etc.

¡Entonces! ¿Qué paso con la formación ciudadano/a y valórica de los Colegios Particulares Pagados y Universidades que los prepararon? ¿Qué hace que la mayoría de este destacado elenco qué participo en estas acciones no se pudieron frenar y prevaleció su codicia e incontinencia financiera? Bueno muy simple, la misión y visión de entregar personas integras, críticas, solidarias y altamente cualificadas de esas instituciones a la sociedad, perecieron ante un modelo de desarrollo neoliberal que en la trayectoria educativa de este selecto grupo fue absorbido por el individualismo y la máquina publicitaria de la Dictadura (De la que muchos/as formaron parte y muchos/as apoyaron),  que difundía  idolatría a la libertad y a la  capacidad  individual de acumular riqueza como fin último de su proyecto de vida y reproduciendo ello en sus descendientes.

 ¡Y en Pandemia! ¿Qué pasa con los porfiados/as del barrio alto que hacen fiestas en sus departamentos, que se van en helicóptero a la playa para burlar las barreras sanitarias, empresarios/as que adulteran los salvoconductos para que sus trabajadores/as sigan produciendo?  ¿Qué pasa con las capas medias que van al supermercado sin salvoconducto, salen en vehículos sin necesidad de hacerlo, hacen gimnasia en lugares clandestinamente (Culto a figura)?  ¿Qué pasa con los sectores vulnerables que carretean en sus territorios, pelean e incluso niegan esta pandemia cuando algún medio de comunicaciones les pregunta? O ¿Con la delincuencia que claramente aumento en tiempos de pandemia? Lo mismo en los tres grupos (Sí se considera que la mayoría las/os desobedientes son personas entre los 15 a los 36 años mayoritariamente), cada cual con sus características propias de sus contextos sociales, económicos y culturales desobedecen las normas de las pandemias. ¿Porqué? Ni sus familias, ni Jardines Infantiles (Los/as que fueron), Escuelas, Liceos, Colegios, IPES y Universidades fueron capaces de internalizar en alguna parte de sus trayectorias educativas y de especialización valores, virtudes altruistas y humanistas universales de las diferentes vertientes que la componen. Es decir, los ejes y las vigas maestras del proceso educativo no fueron fecundos. Sobre los/as delincuentes en pandemia, es peor, lo más probables es que son desertores del sistema educacional de todos sus niveles y modalidades.

Por lo antes expuesto, cuesta mucho pedir a alguien que le dijeron, desde los medios de comunicación masivos durante toda su vida que: ¿La libertad es lo más importante? ¡Y ahora pedirle que se quede en su casa!, ¿Tu éxito depende solo de su esfuerzo? ¡Y ahora pedirle qué le importa el resto! ¿Nadie te va regalar nada? ¡Ahora pedirle que sea solidario!  ¿Lo que más  importante eres tú?  ¡Y ahora pedirle que empatice con la responsabilidad y el dolor de las personas ¡, etc. Ello es imposible.

La trayectoria formativa de los/as ayer alumnos/as y hoy ciudadanos/as fracaso en todos sus niveles y modalidades.  La visión y misión de todas las instituciones educativas complementada de forma magistral en el papel con la Constitución Política (Ayer en la LOCE y hoy la LEGE), a la luz de los hechos sólo son simples declaraciones que no pasan de ello.

El sistema educacional chileno desde el punto de vista de la pertinencia, coherencia, contextualización, actualización y relevancia a nuevas realidades está claramente obsoleto. No da respuestas a coyunturas como las de hoy, donde nos demanda respeto, empatía, solidaridad, apoyo, reciprocidad y colaboración, pues, el modelo y trayectorias educativa sucumbió al modelo de desarrollo neoliberal con componentes y énfasis antagónicos a lo que requiere este momento y el devenir de este futuro marcado por la incertidumbre.  

Desde esta perspectiva, hoy se hace necesario la construcción de un Nuevo Sistema Educativo Nacional  Unitario (SENU), que dé cuenta del momento histórico que vivimos y responda a este, donde se valore el bien común y el Estado, como estructura política, jurídica y administrativa, dé respuesta de manera permanente a todos/as sus hijos/as en los diferentes momentos del ciclo de vida de estos/as,  garantizando el derecho no sólo a la educación durante su ciclo vital, sino también se estructure a partir de los valores  humanistas provenientes de todas sus vertientes que apuestan por el progreso  y desarrollo de la humanidad.

En línea de desarrollo, me permito proponer ideas y una humilde aproximación a la necesidad de fundar una Nueva Escuela (Con su soporte en SENU), que contemple los siguientes visiones y componentes:

  • El acento en la participación proactiva de los/as estudiantes con el ambiente que les rodea, siendo el desarrollo cognoscitivo fruto de un proceso colaborativo.
  • Logro de aprendizaje de los estudiantes mediante la interacción social: van adquiriendo nuevas y mejores habilidades cognoscitivas como proceso lógico de su inmersión a un modo de vida.
  • El desarrollo de los estudiantes en una cultura o en un grupo perteneciente a una cultura puede no ser una norma adecuada (y por tanto no extrapolable) Toda persona aprende acorde a su cultura , por lo tanto, los aprendizajes deben ser  contextualizados.
  • Los/as alumnos/as al llegar a la escuela el primer día no son un vaso vacío…. que hay que llenar, representa una estructura cultural antigua y que no saben nada y que gracias a alguien que va enseñando se va llenando el vaso.
  • El aprendizaje no es un solo proceso parcial del cerebro, sino es un todo, que toma las experiencias aprendidas que traen los estudiantes y las nuevas, donde todo el cerebro se mueve en su totalidad como indica la neurociencia.
  • Enseñar salud mental e integral, para ayudarlos a recuperarse en una red de seguridad de las escuelas
  • Los/as docentes desde la pedagogía deben preocuparse no solo del ¿Qué y cómo? Enseñar, sino también desde una mirada más amplia y con el mismo valor del ¿Por qué? y ¿Para qué?
  • Enseñar: Pensamiento Crítico, Comunicación, Colaboración y Creatividad.
  • Enseñar:  Filosofía para poder
  • Educación científica, enseñar la solidaridad, colaboración, generosidad y confianza.
  • Formar en la: Inteligencia emocional, perseverancia, adaptabilidad, empatía, creatividad, autorregulación, compasión, resiliencia, comunicación y digitalización.
  • Educar y formar en: Medio Ambiente / Sociedad y Sociedad /Medio Ambiente.

Sólo de esta forma podremos no seguir admirándonos hipócritamente de parte de la desobediencia ciudadana respecto a las normas de la pandemia, cuando asumamos que este el resultado de la aplicación de un experimento social y ciudadano ultra neoliberal, por más de 40 años en nuestro país, que superó y borró todos los sentidos, valores y habilidades altruistas que desarrollaba nuestro sistema educativo en sus estudiantes.

Esta crisis sanitaria con consecuencias socio económicas, es una oportunidad para como país y sociedad, repensar y evaluar cómo nos hemos comportados en las últimas décadas y replantearnos con variadas nuevas decisiones un nuevo orden, el COVID 19 no nos lleva a un mañana apocalíptico, pero de lo que decidamos mañana dependerá la configuración de nuestra en los próximos años y décadas. De ahí esta propuesta de pensar una Nueva Escuela puede ser una buena decisión. Dejando que en claro que el responsable principal de la desgraciada gestión en Chile frente a la Pandemia es del Gobierno y en particular de su Presidente Sebastián Piñera.

Sobre el autor: Fernando Ochoa del Río, es ex Presidente Comisión Educación y Ex Presidente Profesores del Partido Socialista de Chile

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